miércoles, agosto 03, 2005

Sacrificio

eeesta es la 5º vez que intento arreglar este post... en fin, cada vez es más corto...
Principalmente decía que estoy pensando en mil cosas a la vez y todo eso, intentando sacar a la luz la 4ª entrega del Manual Posser... y nada, dejaros aquí un trocito de mi inspiracion. Es una historia corta y se llama Sacrificio (sí, es el título). Espero que os guste. A mí me encanta.
Sacrifícame, llévate mi alma lentamente. No la quiero.
No me sirve de nada, está vacía. No siente, no piensa, no llora. Tampoco ríe ni sufre. No quiero un alma inservible. Llévatela. Pero hazlo lentamente. Quiero sentir cómo se va despegando de la carne, cómo se doblega ante ti antes de ser engullida, como todas las que has engullido antes. Eres como Saturno, te tragas a tus propios hijos, uno cada vez, pero tu hambre nunca cede. Y si lo haces, tu costumbre es tan fuerte que no lo evitas. Sé que no lo haces. Te gusta oír el crujido de los huesos, el gotear de la sangre, ver los ojos húmedos de tus hijos mientras los liberas de sus almas inútiles.
Estoy entre tus brazos como si fuera tu amante, te unes a mi en tu beso. Me aprietas contra ti. La Muerte. Nunca te han representado realmente. Dicen que miras al moribundo desde las cuencas de tus ojos inexistentes, con una macabra e inmortal sonrisa sin labios, y te llevas a tu nuevo hijo silenciosamente entre tus huesudas manos, cubierta con una tela vaporosa, con tus ropajes negros y raídos. A veces te representan con una hoz, imagen de que siegas la vida que plantas unos años antes, cuando preparas la siguiente cosecha. ¿Qué harás conmigo después? ¿Dónde iré a parar? ¿Iré a un granero de almas, esperando entre miles de millones a que me conviertan en harina, que dará de comer a otros seres, o me depositarás entre la tierra esperando que germine de nuevo para volver a recogerme? Mi muerte acabará siendo vida de nuevo. No desperdicias a tus criaturas.
Y sin embargo te estoy mirando esos ojos claros y en los que veo mi reflejo, y me besas mientras te llevas mi alma. Tus manos sujetan mi espalda para evitar que caiga, agarrándome dulcemente, casi sin sentir el tacto. Siento mis rodillas flojas, el palpitar del corazón todavía debatiéndose, los dedos me hormiguean. Pero nada de eso parece sorprenderte. Sin embargo es una sensación agradable. Todo a mi alrededor gira y da vueltas pero también está quieto. Puedo oír el sonido más sutil pero no mi propia respiración. Sé que mi corazón aún late porque golpea contra mis costillas pero no siento su errático ritmo devolviendo la sangre a los miembros, porque ya no hay nada que pueda devolver.

Y sigo contemplando este momento desde mi lado, sabiendo que no se volverá a repetir, mirando cómo todo se vuelve borroso, cómo ya da igual si es lunes o jueves, si el cielo es azul o no.

Entonces te separas de mí y me dejas casi inerte en el suelo, mientras me sonríes dulcemente, sabiéndote conocedor de mis secretos, de mis sueños rotos, de mis lágrimas y de mis recuerdos. Y tu sonrisa se ensancha enmarcando tus dientes en labios sonrojados, dejando entrever dos afiladas puntas blancas casi rondando las comisuras... Y después no veo más. He cerrado los ojos. Ya llega mi final, mientras me acaricias delicadamente la mejilla, cuando todo se detiene, y finalmente pierdo conciencia del mundo.
Está sonando: Requiem for a Dream.

3 comentarios:

Opium Dwarf dijo...

Uffff >_< k bien escrito está esto! Me ha puesto la gallina de piel :S, sin palabras.

ℝFD GAZ dijo...

Wen relato, mu weno.
Scribes to bien :)

Anónimo dijo...

Que caña tiaa!! (vale, ya lo habia leido pero me gusto XDD)...

besitos!!