Este fin de semana ha sido bestial. Ha habido de todo. Besos, lágrimas, abrazos, discusiones, carcajadas...
Siento haber sido borde. Pero es duro y difícil darse cuenta de que habéis derrumbado mi muro, y los vestigios que quedan de mi muralla protectora están llenas de graffitis. Me habéis invadido y ahora las cosas me duelen más, porque no hay nada que las separe...
Bueno, yo me entiendo. Aun a pesar de haberme jodido la muralla, os quiero.
2 comentarios:
Bueno, pero, siguiendo con tu bonita metáfora...hay dos tipos de muros: los de carga, que son los que soportan la estructura de tu casa, y los que no son de carga(que no sé cómo se llaman) y que dividen habitaciones. A veces uno cree que son necesarios, peero decide(voluntariamente o no) romperlos para hacer una habitación más grande, o porque tiene más trastos y no puede guardarlos en habitaciones tan pequeñas. Las obras son sucias, caras, y fastidiosas, pero al final merece la pena porque tienes una habitación más grande, más lujosa y donde caben más cosas...
En fin, que te quiero con locura y ale, a establecer analogías entre ti y tu casa ^^
quise decir tú, no ti :S
Publicar un comentario