No tengo mucho que contar. Sobrealimentación en la cena de Nochebuena, ayer me leí tres libros cortos y con la misma adicción al azúcar y al chocolate de siempre.
El nombre del post viene a que, después de la panzá de garbanzos que me ha metido mi madre pal cuerpo (me está cebando para la cena de la noche de Reyes xD), mi padre va y saca mandarinas.
Hasta ahí todo normal. La mandarina era bastante grande, y me puse a quitarle la cáscara.
En esto que veo que uno de los gajos no está en todo su esplendor. Está un poquito marrón y abierto por la mitad. Como los demás gajos estaban en buen estado, quité el malo y fui a coger otro... cuando de repente... vi que el Vecino del Gajo Malo había salido a dar un paseo por el barrio...
Está sonando: The Blitz, 1940, de Chronicles of Narnia, OST
2 comentarios:
Uich!!! mandarina??? No te habrás equivocado de fotito? eso es una manzana (minúscula) pero manzana; o no??? aún me dura la resaca??? :P
Dark kisses
QUE FUERTEEE!!
A mi me paso eso con una carchofa... lo que pasa es que me encontre SOLO medio gusano... como te imaginaras, no he vuelto a probarlas... xDDD
Si te sirve de algo... en un documental vi que los potes del tomate permitian cierto numero de insectos... Asi que, a saber cuantos gusanitos como el habitante de la mandarina nos habremos comido...
(Valeeeeeeee, no se para que he dicho esto... porque mañana tengo que comer arroz a la cubana.... y se lo va a comer dinio...)
Eeen fin guapa, que miiiiiiiil besos!!!
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