¡Cuánto ha cambiado todo desde la última vez que escribí! La
familia con la que vivía era genial, los niños eran magníficos y
la madre un tesoro. Dios, qué equivocada estaba. La madre estaba
loca y los niños eran bien violentos. Muchos habréis visto en
twitter la foto de mi pobre pierna. Seis meses después y la marca
sigue ahí.
El trato de la familia y el bagaje que ya llevaba pues me han
hecho tocar fondo (y ganar nueve kilos más), así que fui a mi
médico en busca de ayuda y me soltó que eso de estar deprimida es
por ser egoísta y soberbia, y que a él le pasaba lo mismo, hasta
que encontró a Dios, y que él cuando tenía un problema se
refugiaba en dios, que yo, como no creía, pues a ver quién me
ayudaba. El médico telita. Por fin hace un par de semanas
llegó mi primera cita con mi segunda psicóloga. El primero fue hace
mes y poco por lo privado y me sacó unas campanitas y me puso allí
mismo a hacer meditación. Según él mi problema es que me creía
mejor que los demás porque uso palabras muy técnicas (dije "Hace
eones que no veo a mis amigos") y que como eso es de ser
repelente pues la gente no me quiere. En fin, mi psicóloga es un
amor de persona y me escuchó durante muchísimo tiempo, adivinó la
mitad de mis síntomas antes de que se los fuera diciendo y yo sé
que es su trabajo, pero le hablé de mierda muy gorda que algunos
conocéis, y los más veteranos saben que he aguantado mucho tiempo.
Llevaba desde 2011 hablando con mis doctoras (tanto la de Córdoba
como la de Granada sobre mis problemas, y que necesitaba ayuda, y
ellas decían que era ansiedad porque estaba gorda (todo es porque
estoy gorda) y que lo que tenía que hacer era andar. Andar ya andaba
cuando tenía que trasponer desde Plaza de Toros a Bola de Oro (5km)
en una hora para dar clases particulares. En fin. De mi coco ya os
iré contando.
A lo que venía a hablar y lo que estáis esperando es lo del
Whole30. ¿Qué coño es el whole30, diréis? Pues os voy a mandar a
investigar. Básicamente es cambiar tus hábitos alimentarios durante
30 días. ¿Qué hábitos? Resumiendo muy mucho:
- No azúcar
- No legumbres
- No cereales
- No lácteos
- No alcohol (y aquí diréis, pero Sheila, si tú no bebes! Ah, pero es que uso vino blanco pa cocinar... y ya no)
Luego también te sugieren una dosificación de alimentos y tres
comidas al día y sin merienda, pero beh, me lo he saltado cuando me
ha hecho falta y punto. Que ha sido a diario, porque para empezar recomiendan platito chico xD.
Hoy sábado se cumple mi séptimo día completo (comienzo el 8)
así que qué menos que ir contándoos. Las razones de tomar estos
hábitos han sido varios. Mi último análisis dice que tengo
colesterol (ha ido subiendo y ahora está dentro del límite, pero
alto) Tengo síndrome de ovarios poliquísticos, y me han mandado
pastillas. Esto y el estrés me provocan anemia. El estrés me afecta
al estómago y llevo desde finales del 2012 con problemas de
estómago, y teniendo que tomar 40mg de omeprazol diarios. El estrés
también me jode las cervicales, conque dolores de cabeza periódicos,
y también provoca que mi bruxismo vaya a peor, que también
significa dolores de cabeza, deterioro de muelas y dientes en
general, y caries. El whole30 ayuda con las alergias e intolerancia a
alimentos (te quedas con lo básico (si tienes alergia a alimentos
permitidos en el whole30 pues buscas cómo sustituirlos), el síndrome
de ovarios poliquísticos, el colesterol, dolores articulares,
problemas de sueño, reflujo estomacal... Entenderéis que empezara
con esto.
Sigo tomando medicación para todo eso (sólo he tenido que tomar
para las cervicales un día), la píldora y el hierro sigo con ellas,
y el omeprazol estoy pensando en dejarlo porque ya ni noto pesadez ni
noto el estómago como lo estaba notando antes. Es que ya ni me estoy
preocupando de la digestión. Tengo muchísima más energía, he
pasado la mayor parte del mono (aunque sigo pensando en donuts de
chocolate), pero ya no voy por la casa a lo yonki. Estoy durmiendo
mejor, de hecho ayuda bastante a mi insomnio. Me da sueño antes
(pero yo soy gilipollas y no hago caso), y me va a bajar la regla en
cuatro días, pero no me noto tan hinchada ni tan de mala
hostia. Es jodido levantarme y no poder tomarme un colacao con
magdalenas del pueblo, o una tostada de jamón con aceite y un té.
He comprado leche de almendras pero además de tener azúcar añadida
me pareció demasiado empalagosa y el chai que me hice con tantas
ganas ahí se quedó ladeado hasta la mañana siguiente. Probaré con
leche de coco, o pasaré de beber chai en una temporada :____(
Igual queréis ver qué como, así que os lo voy a enseñar:
Sábado 2:
El sábado no desayuné porque no me entraba nada y porque estaba nerviosa porque mi madre se iba a un partido de fútbol. Ese día almorcé y cené lo mismo: calabacín y judías verdes salteadas, ensalada de tomate y zanahoria (con salsa verde casera) y hamburguesa (las hace mi primo y no les pone pan).
Domingo 3:
Para desayunar, judías, zanahorias, tomate y hamburguesa de la noche anterior, y como tenía mono de dulce me hice una tortita de plátano. (Machacas el plátano, le pones canela, huevo batido, y a la sartén)
Almuerzo, guisantes con jamón y la ensalada de antes, que no tuve cojones a comérmelo todo. Naranja de postre.
Cena: salteado de judías con zanahoria (con salsa verde), hamburguesa (sí, que estaba descongelada y se iba a poner mala) y coliflor aliñada con ajo y vinagre.
Lunes 4:
Desayuno: Jamón serrano a la plancha, coliflor, un poco de atún de lata y un kiwi.
Almuerzo: Salteado de judías y zanahoria, tomate aliñado y solomillo (mi madre se comió la mitad xD)
La cena fue simple: Atún de lata y judías con zanahoria.
Martes 5:
Desayuno: Coliflor aliñada y tortilla de jamón. Manzana.
Almuerzo: Coliflor, pavo con cúrcuma y pimienta, tomate aliñado y kiwi.
Pez limón, espinacas salteadas con jamón, ajo y vinagre, zanahoria y mahonesa casera de tomate (sí, se puede comer mahonesa y salsas en tanto sean caseras y de alimentos permitidos)
Miércoles 6:
Desayuno: Naranja, tomate aliñado, pavo del día anterior, calabacín a la plancha (a mí me gusta medio quemado) y un poco de mahonesa.
Almuerzo: Tomate aliñado (sí, me gusta mucho), calabacín, zanahoria salteada, chuletas de lechón con un poco de mayo por encima, y fresas del pueblo.
Por la noche estaba vaga y cené ensalada de lechuga, una tortilla de jamón y lo que quedaba del pavo.
Jueves 7:
Guisantes con jamón, zanahoria cruda, atún y plátano para desayunar.
Para almorzar tenía ganas de algo muy especiado, así que lo que veis a la derecha es carne picada (cerdo) con pimiento rojo y verde, cebolla, ajo y zanahoria muy picadito, y luego especiado con sal, pimienta, pimentón picante, cúrcuma, curry y jengibre. Está para morirse de rico. Tomate aliñado y fresas.
Estaba de bajona (diré que son las hormonas o bueno, leed lo de arriba que estoy yendo al psicólogo xD) y no tenía ganas de comer. Mi madre había prometido caldo de pollo, pero no estaba por ninguna parte y aunque no tenía hambre me dolía la cabeza y necesitaba comer algo para empastillarme, así que picoteé un poco de esto.
Viernes 8:
Para desayunar me he regalado tortitas de plátano (salen dos porque las hice más pequeñas, y se tostan enseguida, pero no están quemadas), calabacín y lo que quedó de la carne.
Para almorzar chuletas de lechón con un salteado que he hecho de judías verdes y tomate. Mayo de tomate, y la manzana.
La cena! Y el esperado caldo de pollo (con pollo al fondo). Puré de verduras (mucha zanahoria, dos patatas (se pueden comer pero no abusar, y ha dado para cuatro raciones de puré), nabo, apio, pimiento, cebolla... yo qué sé lo que le he echado...)
Los resultados hasta ahora:
2.3kg perdidos de peso en 7 días, y 15cm de contorno (cintura) menos.
Así que voy a seguir el mes, a ver qué pasa.